Sabes
dijiste
nunca
nunca fui tan feliz como esta noche.
Nunca. Y me lo dijiste
en el mismo momento
en el que yo decidía no decirte
sabes
seguramente me engaño
pero creo
pero ésta me parece
la noche más hermosa de mi vida.
Ahora escribo pájaros.
No los veo venir, no los elijo,
de golpe están ahí, son esto,
una bandada de palabras
posándose
una
a
una
en los alambres de la página,
chirriando, picoteando, lluvia de alas
y yo sin pan que darles, solamente
dejándolos venir. Tal vez
sea eso un árbol
o tal vez
el amor.
Todo lo que he escrito sobre nosotros es mentira No es lo que fue sino lo que yo quise mis nostalgias detenidas en inalcanzables ramas mi sed extraída del pozo de mis sueños bocetos alumbrados. Todo lo que he escrito sobre nosotros es verdad tu belleza o sea una cesta de frutas una mesa en el campo cuando me faltas tú o sea cuando me convierto en la última farola de la calle del último rincón de la ciudad cuando tengo celos de ti o sea cuando corro de noche entre los trenes con los ojos vendados mi felicidad o sea río soleado que rompe sus diques. Todo lo que he escrito sobre nosotros es mentira todo lo que he escrito sobre nosotros es verdad. Nazim Hikmet
El tiempo está parado. Somos nosotros los que huimos.
¿Te dolió? ¿es que nos ha cambiado el otoño?
Sí, nuestros sueños se mustian con el tiempo,
y con la realidad se va una conformando
si es que por los años transita honestamente.
¡Qué calma! Si callamos sólo se oye el reloj.
Ante nuestra ventana susurra el único árbol.
Y, si alguien en el patio escucha atentamente,
suena a lo lejos como si tocaran a Chopin.